En Playas del Rosario, una brisa de cambio se hace sentir, impulsada por el descontento de la población ante los deficientes servicios públicos, la escasez de agua para necesidades básicas y los frecuentes cortes de luz.
Este malestar refleja una preocupación profunda por la calidad de vida y el bienestar de los habitantes de la comunidad, quienes demandan soluciones concretas y efectivas por parte de las autoridades.